Luego de que Toni haya financiado los explosivos que encargó Donald, y de que haya asesinado al waka gashira de la Yakuza, 8-Ball lo llama para notificarle de que la bomba está preparada. Cuando Toni va a retirarla, 8-Ball le entrega una furgoneta Rumpo que aloja la bomba, a la vez que le advierte de que no debe sufrir mucho daño, o explotará. Acto seguido, recibe una llamada de Donald y le pasa el teléfono a Toni.
Desde su habitación en el albergue de Pike Creek, Donald le explica a Toni que estuvo analizando los planos de Fort Staunton que obtuvieron, y que descubrió que por debajo del distrito se encuentran sus puntos débiles. Le ordena infiltrarse a través de varias infraestructuras y así llegar al subsuelo de Fort Staunton. De esa manera, Toni evadiría a la familia Forelli y llevaría a cabo la destrucción del distrito que reduciría los precios de adquisición de las propiedades establecidas, y así las reconstrucciones reportarían grandes ganancias tanto a Cipriani como a Donald. La llamada termina y Toni se dispone a realizar el encargo.
Donald hablando acerca de la infraestructura.
Las instrucciones.
Trayecto al subsuelo
Los Forellis atacantes.
Toni se sube a la Rumpo y emprende trayecto hacia alguna de las tres entradas del túnel Porter en Shoreside Vale[1]. Una vez que Toni haga cien metros desde a la tienda de 8-Ball, es perseguido y embestido por dos Forellis en un Forelli Exsess. Evitando que la furgoneta sea destruida, Toni entra al túnel y eventualmente llega a una intersección en Wichita Gardens. Desde ese punto, emprende rumbo hacia el este, transitando por varios tramos del puente que se encuentran bajo construcción, teniendo que evitar así varios escombros dispuestos en los carriles. Mientras tanto, el automóvil de los Forellis colisiona mucho con los elementos dispuestos y explota, asesinando a sus ocupantes. Toni llega a Staunton Island y llega a otra intersección, esta vez en Rockford. A continuación, se dirige hacia el sur y llega al subsuelo Fort Staunton.
Plantación de las bombas
Toni plantando la primera bomba.
Toni continúa avanzando hacia el oeste y luego hacia el norte, llegando al punto más avanzado de la obra, en donde encuentra a dos obreros. Para no dejar testigos, los asesina e ingresa a las vías del antiguo metro, dirigiéndose ahora hacia el este. Toni llega a unos escombros que bloquean el trayecto de las vías, se baja de la furgoneta y planta el primer conjunto de explosivos, mientras activa el temporizador de tres horas[2] de la bomba.
Toni sube nuevamente a la furgoneta y transita los rieles, esta vez en sentido opuesto. Cuando llega a una ramificación de las vías, gira en 180 grados y conduce hacia el sur. Atraviesa los escombros que lo obstruyen y llega a la plataforma de la antigua estación del metro, actualmente en desuso. A continuación, se baja del vehículo y planta el segundo conjunto de bombas. Otro obrero llega a la escena y ve lo que Toni estaba por hacer. Nuevamente para no dejar testigos, Toni asesina al trabajador.
Toni continúa conduciendo por las vías hacia el sur, llegando a otra plataforma de la estación. Se baja de la furgoneta, planta la última bomba y se dispone a salir del subsuelo.
Un obrero siendo asesinado.
La última bomba, plantada.
Huida
Con las tres bombas plantadas, Toni emprende el regreso a la superficie antes de que el temporizador llegue a cero. Toni se dirige al norte para intentar salir por donde entró, pero dos soldados y un automóvil de los Forellis bloquean el camino de regreso. Toni se percata de la presencia de otra salida, obstruida por una puerta. Ya sea con la Bobcat allí aparcada, el coche de los Forellis o la misma Rumpo que cargaba las bombas, Toni atraviesa la puerta y se dirige a la superficie mientras una sucesión de explosiones ocurre detrás de él. Toni escapa del subsuelo a través de las escaleras de la estación y huye rápidamente de Fort Staunton, mientras los reventones persisten y dañan severamente los inmuebles de la zona, además de llevarse la vida de varias personas. Luego del estruendo, Toni recibe $5.000 y la misión finaliza.
